Portal Profesional de Envase y Embalaje

Cómo garantizar la seguridad de los alimentos

  • Publicado el 04 de Diciembre de 2018
  • Daniela Verhaeg

A medida que aumenta la complejidad de los métodos de producción y empaquetado de alimentos, también lo hace el riesgo de contaminación por cuerpos extraños como, por ejemplo, por metal y vidrio. Por ello, las nuevas tendencias y formatos de empaquetado requieren soluciones de inspección de productos especialmente adaptadas para ofrecer a los consumidores protección fiable frente a contaminantes físicos.

Los nuevos formatos de empaquetados están en pleno auge. Los cambios demográficos, los cambios en los hábitos de compra y consumo de los clientes, y una creciente demanda de los comerciantes están impulsando la innovación en el mercado de empaquetado de alimentos. Debido a un número cada vez mayor de hogares pequeños y de una sola persona, así como a la tendencia de cambiar de la "gran compra" semanal hacia compras más frecuentes y espontáneas, está aumentando la demanda de producir unidades de empaquetado más pequeñas. Asimismo, los consumidores quieren más comodidad y platos fáciles de preparar. Desean que los fabricantes de alimentos actúen de acuerdo con el medio ambiente y de una manera sostenible mediante el uso de material de empaquetado reciclable y funcional que contribuya a reducir los desperdicios de alimentos.

Al mismo tiempo, las exigencias del sector minorista con respecto al empaquetado moderno de alimentos van mucho más allá de la función tradicional de protección de productos. Además de buenas propiedades de barrera, protección ante roturas durante el transporte y neutralidad de gustos, los comerciantes esperan un empaquetado listo para la venta que sea estable y apilable, así como que se encuentre disponible en distintos tamaños para adaptarse a la amplia variedad de compradores en todos los canales. Asimismo, los comerciantes exigen el menor peso posible y el uso mínimo de material para los costes, los desperdicios y el posible impacto medioambiental que tiene el transporte sean lo más bajos posibles.

Los cambios en los hábitos de compra y consumo de los clientes están impulsando la innovación en el mercado de empaquetado de alimentos
Los cambios en los hábitos de compra y consumo de los clientes están impulsando la innovación en el mercado de empaquetado de alimentos

Líderes de tendencias: empaquetado flexible de materiales compuestos

Los líderes de tendencias de empaquetado de alimentos incluyen principalmente empaquetado fabricado en material flexible, plásticos de varias capas y laminado de aluminio como los de las bolsitas verticales. Estos ofrecen excelentes propiedades de barrera incluso cuando el grosor de la lámina es bajo, y ofrecen una eficacia de peso notable en comparación con las latas de metal y los rígidos contenedores de plástico, lo que reduce los costes de transporte y permite ahorrar en recursos. Lo mismo se aplica a los sobrecitos de un solo uso que, por ejemplo, se usan cada vez más para la comida preparada.

También se prevé que siga creciendo el aluminio como materia prima para el empaquetado, principalmente, en compuestos de láminas con plásticos. La función de barrera absoluta de la materia prima es asombrosa; las buenas propiedades de conformado, junto con una forma estable, hacen que el aluminio se adecue especialmente a los platos de consistencia pastosa empaquetados en tubos. Ha aumentado el tamaño y forma de la variedad de empaquetado empleado para bebidas y alimentos en latas hechas de aleaciones de aluminio: los bordes de las latas con cavidades proporcionan peso, eficiencia de materia y una forma de gran estabilidad. Los contenedores y carcasas de aluminio resistentes al calor y a la esterilización permiten a los consumidores manipular de la manera más sencilla la comida preparada para el horno, y suelen ser la opción preferida para productos congelados y precocinados.

Al mismo tiempo, los compradores siguen teniendo muy en cuenta la sostenibilidad y el medio ambiente. La contaminación por plástico se considera una amenaza significativa para los mares y ha hecho aumentar la atención de los consumidores y el gobierno con respecto a la reducción de desperdicios de productos de un solo uso. Según un estudio llevado a cabo por la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios), en el marco del proyecto de investigación europeo CIRC-PACK financiado por la Comisión Europea, el 50 % de los consumidores españoles estarían interesados en comprar productos cotidianos empaquetados en envases de plástico reciclable. La industria del empaquetado refleja esta tendencia. Los nuevos bioplásticos fabricados a partir de plantas, bagazo de azúcar y hojas de palma se están convirtiendo en alternativas para el plástico capaces de biodegradarse rápidamente. Además, la reducción de grosor de las láminas de plástico minimiza el uso de recursos.

Los nuevos tipos de empaquetado, combinados con la tendencia de más comida rápida, aportan más complejidad a la detección de posibles contaminantes físicos en las líneas de producción y envasado
Los nuevos tipos de empaquetado, combinados con la tendencia de más comida rápida, aportan más complejidad a la detección de posibles contaminantes físicos en las líneas de producción y envasado

Crecientes exigencias sobre inspección de cuerpos extraños

Los nuevos tipos de empaquetado y materiales, ahora más diversos, traen consigo una variedad de nuevos desafíos. Enfocándose en la inspección de productos, aportan más complejidad a la industria de alimentos en lo que respecta a la detección de posibles contaminantes físicos en las líneas de producción y envasado. Los fabricantes de alimentos deben garantizar que sus sistemas de inspección de productos se pueden ajustar para cambiar el empaquetado con la mayor rapidez posible y con un alto grado de automatización, mediante software de alto rendimiento e interfaces de usuario intuitivas con el fin de mantener breves tiempos de cambio y una elevada eficacia general de los equipos. Las soluciones de inspección altamente automatizadas (por ejemplo, mediante el simple acceso a los perfiles de productos almacenados en bases de datos y la manipulación sencilla durante la configuración de nuevos productos) también minimizan el riesgo de errores de funcionamiento. Por ello, se recomiendan los sistemas de inspección con interfaces de usuario interactivas y con pantalla táctil que guían al empleado por el proceso operativo.

 

Optimización de la detección de cuerpos extraños

Factores como el tamaño y la ubicación del contaminante, la velocidad de la línea de producción, el material de empaquetado de los productos y la diferencia de densidad entre el contaminante y el producto influyen en la sensibilidad y el rendimiento de los dispositivos de detección de metales y los de inspección de rayos X. Dada la creciente complejidad de los tipos de empaquetado y los materiales, se recomienda detectar los contaminantes en una fase temprana del procesamiento y la producción. En muchos procesos de producción, las materias primas se suministran en forma de líquido, pasta o pasta aguada, y se bombean mediante sistemas de tuberías antes de mezclarse. Estas materias suelen ser más homogéneas y fáciles de inspeccionar que la comida procesada, y los contaminantes que hay en dichas materias entrantes tienden a ser más grandes y más fáciles de detectar. Mediante la detección y eliminación rápida de cuerpos extraños, también se protegen los equipos de producción en procesos posteriores de posibles daños de los contaminantes al continuar con el procesamiento, a la par que también se minimizan la pérdida de productos y los desperdicios de alimentos.

La inspección de productos en busca de contaminantes tras el procesamiento y el empaquetado exige atención especial al elegir un sistema para inspeccionar los productos. Por ejemplo, en el caso de contaminantes de aluminio en empaquetado no metálico, la detección de metales se considera la tecnología más adecuada. El aluminio es un metal ligero y un buen conductor eléctrico, pero su absorción radiográfica es inferior en comparación con otros metales como, por ejemplo, los metales férricos y el acero inoxidable. Esto provoca una reducción de la sensibilidad en los sistemas de inspección por rayos X y significa que solo pueden detectar el aluminio si tiene el doble de tamaño que los metales férricos o el acero inoxidable. En cambio, gracias a sus buenas propiedades de conducción, el aluminio se puede detectar en tamaños más pequeños mediante la detección de metales, por lo que esta sería la mejor solución.

En contraste, cuando se intenta detectar contaminación metálica en empaquetados de laminado de aluminio, los detectores de metales tienen dificultades para localizar los contaminantes entre el empaquetado. Debido a la forma en la que funcionan los sistemas de inspección por rayos X, el empaquetado de aluminio tiene un impacto insignificante en los niveles de detección. La inspección por rayos X puede ver directamente a través del laminado de aluminio de baja densidad y obtener una mejor visión de la contaminación metálica contenida en el interior, con lo que constituye la mejor solución en este caso.

El reconocimiento de contaminantes en la base y los laterales (concretamente, en los contenedores de vidrio y latas) supone importantes exigencias técnicas para la tecnología de inspección
El reconocimiento de contaminantes en la base y los laterales (concretamente, en los contenedores de vidrio y latas) supone importantes exigencias técnicas para la tecnología de inspección

Desafíos concretos que presentan los nuevos materiales y formatos de empaquetado

Los tipos de empaquetado flexible (como las bolsitas verticales, los tarros de vidrio y las latas de peso optimizado con la parte posterior abovedada) traen consigo el peligro oculto de los puntos ciegos. Los contaminantes pueden acumularse en los bordes de estos tipos de empaquetado, lo que dificulta la detección. Un desafío en particular lo presenta la contaminación de vidrio en vidrio, por ejemplo, cuando el vidrio del borde del tarro se ha roto, cae en el recipiente y, en el peor de los casos, se aloja en los bordes de la parte posterior abovedada del tarro. En general, el reconocimiento de contaminantes en la base y los laterales (concretamente, en los contenedores de vidrio y latas) supone importantes demandas técnicas para la tecnología de inspección. Las soluciones de rayos X modernas inspeccionan cada producto desde dos ángulos, desde los cuales comparan las dos imágenes para optimizar la detección.

Además, gracias a los desarrollos tecnológicos, la identificación de pequeños contaminantes resulta más rápida y fiable. Por ejemplo, el sistema de inspección por rayos X X34, que METTLER TOLEDO introdujo hace poco, ofrece una combinación de tecnologías que permite a los productores detectar contaminantes pequeños con un alto rendimiento. Una de sus funciones clave es su generador de potencia óptima mejorado, que maximiza automáticamente la sensibilidad de detección optimizando la potencia y los niveles de contraste de cada producto. Asimismo, el software de alto rendimiento del X34 permite la configuración automatizada de productos sin la necesidad de ajustes manuales por parte del operario, lo que aumenta el tiempo de actividad de la producción y la eficacia global del equipo.

El nuevo sistema de rayos X X34 de METTLER TOLEDO permite a los productores detectar contaminantes más pequeños con un alto rendimiento y optimizar la eficiencia energética
El nuevo sistema de rayos X X34 de METTLER TOLEDO permite a los productores detectar contaminantes más pequeños con un alto rendimiento y optimizar la eficiencia energética

Conclusión

Las exigencias de inspección de productos están aumentando con los tipos de empaquetado de fondo, que poco a poco se vuelven más diversos. En muchos casos, la tecnología de detección de metales o la inspección por rayos X ofrecerá la solución correcta para lograr una detección fiable de cuerpos extraños. No obstante, también hay casos en que se debe instalar la tecnología de detección de metales y el equipo de inspección por rayos X en distintos sitios de la misma línea de producción o envasado. Por ello, siempre es recomendable pedir ayuda a expertos profesionales como METTLER TOLEDO y llevar a cabo pruebas de productos con las que determinar la tecnología que sea más adecuada para detectar cuerpos extraños.

Daniela Verhaeg

Especialista en inspección de productos de METTLER TOLEDO

Últimas revistas