¿Sabes qué tener en cuenta a la hora de elegir el palet que más se ajusta a las necesidades de transporte de tu mercancía? Cada vez se hace más patente que un proceso de logística bien optimizado repercute de forma directa y positiva en las cifras de nuestro negocio. Para implantarlo de forma correcta, es necesario que el conjunto de todos los elementos y operaciones que forman parte de la cadena de suministro estén muy bien pensados y elegidos para ofrecer el máximo rendimiento posible.

Y uno de estos elementos clave son los palets. Destinamos muchos esfuerzos al diseño de los envases primarios y secundarios para el producto que ofrecemos al mercado; en cambio, consideramos el palet como un mero elemento transportador, al que no es necesario prestar demasiada atención.

Sin embargo, ¿nos planteamos si estamos usando el palet adecuado para cada uno de nuestros envíos? ¿Se adapta éste a los requerimientos de la mercancía que debe transportar? Una decisión incorrecta en este sentido podría lastrar todos los recursos destinados previamente.

Entonces, ¿qué debemos tener en cuenta a la hora de escoger el mejor palet para nuestra mercancía? Te lo resumimos en 5 puntos:

1. Carga que debe soportar. Cada tipo de palet debe especificar, en su ficha técnica, el peso máximo que puede sustentar en distintas situaciones. Por ello, debemos tener en cuenta las capacidades de carga a soportar en dinámico y estático (y en racking o estanterías si fuese el caso), y saber en qué tipo de elementos estructurales se va a almacenar. Escoger un palet con una capacidad de carga inferior a la que vamos a colocar sobre él puede hacer que no cumpla con las expectativas, o hasta que se acabe rompiendo.

2. Tipología de producto y embalaje utilizado. Es evidente que la naturaleza del producto que va a transportar un palet determina, en gran medida, cómo debe ser éste, y también lo hace su embalaje primario y secundario. No es lo mismo transportar cajas con una estructura robusta y que se pueden unir fácilmente, que bolsas contenedoras de líquido, sacos o bidones, así como tampoco cualquier elemento sin un envoltorio fijo.

3. Destino de la mercancía. Todos conocemos los tradicionales palets de madera, y que éstos, para poder ser exportados a ciertos países, necesitan ser tratados según la normativa NIMF15 / ISPM15. Además, también es determinante el hecho de poder recuperar, o no, el palet usado. Ciertos tipos de materiales, como el plástico y la fibra de madera prensada, son más aptos para la exportación.

4. Mecanismos de manipulación del palet. El mecanismo con el cual vayamos a manipular el palet también es un factor muy importante a tener en cuenta a la hora de escoger qué características debe tener, o hasta el material con el cual debe estar elaborado. Podemos manipularlo con carretillas, transpaletas mecánicas o eléctricas, o AGV.

También es importante saber si el almacenamiento va a ser en un espacio automatizado, y si en él conviven o no distintas tipologías de palet. Por último, es imprescindible saber qué tipo de rotación van a sufrir los palets, y si se van a mover con más o menos asiduidad.

5. Medio de transporte en el cual va a viajar el palet y su mercancía a transportar. Esto podría determinar el peso/tara del palet, y, a su vez, el material del cual está fabricado. Un palet para transporte terrestre puede ser algo más pesado, mientras que para el transporte aéreo la tara debe ser cuanto más baja, mejor. En el transporte marítimo hay que tener en cuenta el tiempo de tránsito que va tardar a llegar a su destino, y asegurarnos de que el tipo de material utilizado en la fabricación del palet soporte bien los cambios de temperatura o la falta de aireamiento durante todo el viaje.

Otro punto importante son las medidas del propio palet, hecho que puede favorecer adaptarse mejor al medio de transporte utilizado. Así, debemos tener en cuenta, por ejemplo, que las medidas internas de un camión no son las mismas que las de un contenedor marítimo, y, cuando la repercusión del transporte es un coste importante, debemos aprovechar al máximo el espacio disponible.

Aunque los palets ya aparecieron con anterioridad a la Segunda Guerra Mundial, fue entonces cuando se inició su uso de forma más habitual, como respuesta a la necesidad de transportar y distribuir materiales militares y suministros, tales como armamento, alimentos, medicamentos, etc. A día de hoy, se han convertido en un elemento indispensable para toda la cadena logística. Y, como tal, resulta imprescindible prestarle la atención y los recursos necesarios, para no sufrir ningún contratiempo en cualquiera de nuestros procesos de logística.

Conocedores de la dificultad de muchas empresas a la hora de escoger de forma adecuada el tipo de palet que se ajusta más a las necesidades de transporte de su mercancía, en Inka Palet proporcionamos un asesoramiento integral para buscar la solución óptima para cualquier tipo de envío, expedición o exportación.

Somos especialistas en palets y en complementos del paletizado para el sector del embalaje y la logística. Podemos ofrecerte una amplia gama de palets, cajas y contenedores fabricados a partir de diferentes materiales como el plástico, el aluminio, el metal, la madera y el cartón, de medidas estándares o a medida.