Clarissa Odewald, Directora General de thyssenkrupp Rasselstein GmbH
- Publicado el 05 de Noviembre de 2024
“Hay un argumento muy importante a favor de la hojalata: su alta reciclabilidad”
Clarissa Odewald se hace cargo de la Junta Directiva de thyssenkrupp Rasselstein GmbH en un momento en el que la empresa marca hitos importantes para el futuro. Con su experiencia en ventas internacionales y una comprensión profunda de las exigencias del mercado global, se concentra en las soluciones sostenibles, el incremento de la eficiencia y los procesos digitales. En la entrevista expone cómo el único fabricante alemán de hojalata quiere aprovechar los desarrollos actuales para llevar a la práctica diversas oportunidades de crecimiento e innovación.
¿Cuál era su prioridad cuando era directora del departamento de Ventas Internacionales en thyssenkrupp y cuáles son las conclusiones y experiencias que la acompañan a su nuevo cargo como Directora General?
Como responsable de ventas internacionales de thyssenkrupp Rasselstein, me resultaba especialmente importante conocer nuestros mercados en todas sus facetas, en especial, los EE. UU., América Latina, Australia y los Emiratos Árabes Unidos. A través de mi experiencia práctica en la operativa y mis incursiones en las diversas ubicaciones he desarrollado mi percepción de las diferentes necesidades y exigencias de nuestros clientes.
Independientemente de todas las diferencias geográficas siempre he notado un claro punto en común: todos los fabricantes tienen la necesidad de emplear una hojalata de gran calidad para aumentar la eficiencia de sus productos. Precisamente en este segmento de calidad excepcional es donde nos hemos posicionado con nuestra empresa y en este ámbito es donde continuamos con nuestro desarrollo.
Sin embargo, mi actividad en ventas solo representa una parte de mi curva de aprendizaje. Las experiencias que tuve la oportunidad de recopilar en mis estaciones previas dentro de thyssenkrupp son de un valor incalculable para mi actual cargo en la Presidencia de la Junta Directiva Me ayudan a comprender mejor la empresa, no solo desde la perspectiva estratégica, sino también desde el punto de vista de nuestros trabajadores. He vuelto a reforzar esta faceta en mis primeros cincuenta días en la Presidencia. He dedicado esta fase inicial de forma específica a conocer mejor a los compañeros de los diversos departamentos. Durante una serie de conversaciones abiertas he entendido cómo podemos mantener el ambiente positivo de la empresa y en qué puntos podemos ampliarlo.
¿Cuáles son los criterios que puntúan mejor para la hojalata en comparación con otros envases y cómo seguirá imponiéndose el acero para envases frente a la competencia en el futuro?
Hay un argumento muy importante a favor de la hojalata: su alta reciclabilidad. Debido a sus propiedades intrínsecas, es muy fácil separar el acero de envases de otros materiales, de modo que la clasificación es especialmente eficiente. La hojalata siempre se puede volver a introducir en el ciclo de reciclaje sin pérdidas de calidad dignas de mención. Un ciclo cerrado de material como este ahorra mucha energía y recursos primarios; esta característica define al acero de envases como material sostenible. También lo demuestran las cifras: no es casualidad que la cuota de reciclaje de la hojalata sea de aproximadamente el 90% en Alemania desde hace veinte años y alcance ya alrededor de un 80,5 % a escala europea. Trabajamos por mantener estas cuotas para el futuro.
Al mismo tiempo hemos avanzado en la transformación de nuestros procesos productivos. Con el bluemint® Steel, ahora producimos un acero para envases con las mismas propiedades que la hojalata tradicional, pero que emite hasta un 69 % menos de CO₂ durante la producción. De esta manera ofrecemos a nuestros clientes un producto que contribuye en gran medida a la reducción del dióxido de carbono.
Los tres criterios innovación, calidad y orientación al cliente son decisivos para el éxito de thyssenkrupp Rasselstein. ¿Qué hace de thyssenkrupp Rasselstein para mantener el progreso del proceso innovador?
En thyssenkrupp Rasselstein nuestro proceso innovador es amplio y se fundamenta en la cooperación. Nuestro departamento de investigación y desarrollo tiene una base amplia y no solo nos permite impulsar las innovaciones mediante proyectos internos, sino también a través de la colaboración estrecha con nuestros clientes. Un ejemplo del éxito de nuestro impulso innovador es el perfeccionamiento constante de productos que mejoran directamente la experiencia de uso del usuario final, como cuando los consumidores encuentran cada vez más tapas abre fácil en sus latas, lo que les permite prescindir del abrelatas.
Este resultado también se lo debemos a nuestro rasselstein® Solidflex, un material que se distingue por su gran firmeza y excelentes propiedades de moldeado y que es fruto de un proceso intensivo de innovación. La comunicación con nuestros clientes sigue siendo imprescindible para el desarrollo de tales características de producto. Este también será un factor decisivo en el futuro para impulsar nuestros procesos de innovación.
¿Qué entiende por sostenibilidad y de qué manera piensa implementar su concepto en thyssenkrupp Rasselstein?
La sostenibilidad requiere una contemplación integral de los diversos ámbitos en los que participamos como empresa. Nuestro concepto de sostenibilidad se define por cuatro objetivos estratégicos de sostenibilidad que enfocan 12 campos de acción. Junto a la perspectiva ecológica engloba, entre otros, la obtención de beneficios sostenibles basados en el empleo eficiente de todos los recursos con el resultado de un rendimiento máximo y una calidad superior para nuestros clientes. También queremos relaciones a largo plazo, justas y de confianza con nuestros clientes, empleados y proveedores.
Y proteger la salud de nuestros empleados, así como los medios de vida en los países productivos. Por último, quiero resaltar la prioridad de nuestra responsabilidad empresarial con la ecología. Aspiramos a proteger al hombre, a la naturaleza y al clima mediante la producción en neutralidad climática y la implementación consecuente de la economía circular. Para optimizar nuestros productos y procesos utilizamos las posibilidades que nos brindan las nuevas tecnologías y mejoramos el rendimiento económico, ecológico y social.
En los últimos años, thyssenkrupp Rasselstein ha ampliado enormemente la digitalización interna y, con ello, los servicios relacionados para sus clientes. ¿Cómo quiere seguir desarrollando este sector?
Quiero describir el enfoque de nuestra estrategia de digitalización con un ejemplo. He tenido el honor de inaugurar nuestro hackathon interno de la empresa a los dos días de asumir el cargo de presidenta de la Junta Directiva. Este acontecimiento extraordinario reúne a los expertos en digitalización de todos los departamentos para desarrollar soluciones de software innovadoras en poco tiempo. En este caso, se estableció un programa que ayuda a nuestro personal de atención al cliente para que tengan acceso a información central de forma rápida durante sus viajes.
El hackathon es un buen ejemplo de cómo nuestra empresa impulsa la digitalización: como proyecto comunitario. La digitalización no es un proceso que se imponga de forma jerárquica desde arriba. En cambio, son los compañeros de los diversos departamentos los que buscan las soluciones adecuadas en cooperación con los sectores especializados. La comunicación referente a la digitalización, no obstante, también es decisiva en otro punto. Trabajamos de forma intensa en la conexión digital con nuestros socios comerciales para establecer un intercambio sin interferencias y evitar el trabajo manual adicional para nosotros y para nuestros socios.
thyssenkrupp se encuentra ante una de las mayores transformaciones industriales con el cambio del carbón al hidrógeno; al mismo tiempo aumenta la normativa referente a ámbitos relevantes para la empresa.¿Cuál es su estrategia para la empresa?
Es cierto que nuestra empresa matriz thyssenkrupp Steel se encuentra en la que probablemente sea la mayor transformación de su historia empresarial, al alejarse del carbón y usar el hidrógeno verde como principal fuente energética para la producción de acero. En Duisburgo se construye una instalación completamente nueva con un horno de reducción directa (DRI). Allí será donde en el año 2027 comenzará su actividad la primera instalación de reducción directa basada en el hidrógeno. Eso nos ayudará a reducir las emisiones de forma drástica.
Pero también en Andernach trabajamos continuamente en evitar las emisiones de alcance 1 a 3. Para ello utilizamos trenes de mercancías que funcionan con energía regenerativa y aceite vegetal hidrotratado (HVO) para transportar la lámina caliente que nos llega desde la acería de Duisburgo. Así conseguimos evitar la emisión de 2000 toneladas de CO₂ al año. También hemos invertido en una la instalación de una nueva línea de barnizado con la que se evitan unas 1100 toneladas de dióxido de carbono al año.
¿Qué relevancia tiene en todo ello la cooperación entre la política y la industria?
thyssenkrupp Rasselstein trabaja como socio industrial en dos proyectos financiados por el Ministerio Federal de Economía y Protección del Clima alemán para encontrar soluciones sobre cómo usar el hidrógeno en nuestros hornos de recocido. Tenemos que acelerar en extremo las capacidades de la infraestructura del hidrógeno para poder cubrir la demanda futura de esta fuente de energía. thyssenkrupp por sí mismo tendrá un consumo de unas 140 000 toneladas de hidrógeno. La infraestructura tiene que estar preparada para ofrecer un servicio sin interrupciones.
Este tema concierne también a los legisladores: aunque han reconocido el potencial enorme del hidrógeno como fuente de energía, el desarrollo de las condiciones marco aún requiere un gran impulso. El panorama es diferente a nivel de la Unión Europea: la decisión de la UE de normalizar el sector de los envases, sobre todo el reglamento nuevo de envases y residuos de envases (PPWR), es un paso en la dirección correcta. A partir del año 2030, solo los envases reciclables podrán acceder al mercado de la UE. Esta es una seña potente para la economía circular europea y, como fabricantes de hojalata, celebramos sinceramente este avance.